¿Para qué sirve el botón rojo?

Ya lo sabéis. No me extraña, no se habla de otra cosa. Pues sí, yo también caigo. He intentado soportar la presión, pero ha sido imposible. Ya dije algo en casa de Forfy, pero creo que debo una explicación más amplia por aquí. Pasemos pues al orden del día.

Punto 1: Blogger Beta. Después de intentar trasladar el blog a esta nueva versión durante un par de días sin éxito (imaginad la cantidad de clicks que se pueden hacer en un par de días... lo tenéis? Desesperante, verdad?), tuve que hacer casi malabares para migrarlo todo de una vez. Es lo que pasa cuando algo se convierte en un reto personal. Pero lo conseguí. Y no sé hasta qué punto es bueno.

Se me quitaron los acentos de la plantilla que tenía, algunos comentarios ahora me salen anónimos cuando antes tenían su firmita y tal... y lo que te rondaré, morena. No me atrevo a meterme, al menos de momento, con las nuevas plantillas, así que si alguien me cuenta lo que me estoy perdiendo, se lo agradecería mucho :)


Punto 2: El proyecto. Y basta de risas, que se os oye desde aquí ¬¬ ¿Sabéis Indiana Jones, que ha llevado a cabo durante AÑOS su idea de que todas las antigüedades "deberían estar en un museo" (curiosamente, trabajando en la universidad, además)? Pues yo igual, pero en otra rama, que en la arqueología hay mucha competitividad. No voy a dejar aquí mis buenos propósitos, porque el año pasado, casualidades de la vida, tenía uno igualito a éste... Bueno, vale, me he pasado por el Chask, pero ha sido más bien una "declaración de buenas intenciones". Que quede claro.

Aggg... ya sabía yo que se me olvidaba algo en la carta a los Reyes...

Punto 3: Webmissstresss & Co. Y es que tenemos más trabajo (y menos tiempo) que nunca. La plantilla entera está trabajando a destajo en los ratos libres que quedan en estas fechas tan malas, para mimar a nuestros clientes como se merecen. Y ahora, con todo esto de las migraciones (véase punto 1), tenemos que documentarnos para modificaciones varias. Esto va a acabar como el rosario de la Aurora (que, por cierto, el otro día me enteré del origen de esa frase, y es de lo más interesante...).


Punto 4: Las renuncias. Fundamentalmente, a cosas que me relajan. Porque claro, en estos momentos, cosas como ésas te parecen prescindibles. "¡Pero eso es un ERROR garrafal!" Coño, ya lo sé ¬¬ ¿Y qué le hago? Como no termine el proyecto mi madre me echa de casa (y con razón)... entonces sí que voy a tener tiempo para mí, ya veréis: echarle comida a los gatos abandonados, vagar por los parques, hablar con mi amigo imaginario, empujar un carrito del Carrefur con mis pertenencias... wow, eso es vida.

Pompitas... necesito pompitas... :S

Así que, queridos niños y niñas, portaos bien en mi ausencia relativa. Pasaré por aquí escondida para ver qué tal os estáis portando, y no quiero ver ningún tirón de coletas ni guerras de bolas de barro. Y si sois buenos... os traigo chucherías ;)